Luego de casi 12 horas de extrañar a mis chicos (y de vuelo) hago escala en Madrid antes de abordar a Londres. Ahora hay 33 grados en este Aeropuerto y me tomó 45 minutos ir desde la puerta de llegada hasta la puerta de embarque.

Ya aquí se siente ese olorcillo tan español mezcla de tabaco, café tostado y embutidos. Todas las cadenas de comida son españolas, o sea hamburguesas nada y BIENVENIDAS LAS BOCATAS. Además es silencioso (leí que hace unos años dejaron de dar anuncios por alto parlantes así que el que no lee pregunta.

Por gracia de los fármacos y de mi amor que me obligó al ir al doc, de la sinusitis nada (solo el mareo del antibiótico).

Como un viaje de cauas no seria tal sin algo que contar, me vine conversando con un ucraniano que hizo innecesario el ipod, las pelis y la cerveza hasta las 3 de la mañana. Fueron con su familia a visitar amigos en Argentina.

Bue… Me voy a embarque

–

Sent from my BlackBerry® wireless device